Fue una noche como ésta. Lo he recuperado del `Baúl de los Post´. Me pasa cada noche como ésta.
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Luna (del Baúl de los Post)
Ayer la vi. Anoche. La luna; blanca, grande, redonda, poderosa. La luna llena. Y sonreí.
Las largas noches de invierno tienen su recompensa, me consolé: hay más luna, más tiempo de luna. Lo confieso, puede ser cosa de la vida misma pero lo confieso: la luna llena me estimula, me mete directo en vena un chute de vida...¡pero dura tan poco la luna llena...!
¡Las malditas nubes!
Sea como sea, reciba usted un abrazo de su amigo Goran, Don Jota.
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Sí, en realidad me he limitado a trascribir una nota de Goran, mi amigo albano-kosovar. También los gangster tiene sus momentos sensibles; como mi amigo, que tiene su corazoncito de mafioso blando que se acelera con la brisa del mar costasoleño y de una luna, llena de recuerdos, suspendida en la melancolía .
Igual le encargué algo, es posible.
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Cierto, cierto, Javir, los gángsteres también lloran... y alguna luna llena se lo merece. Saludo
ResponderEliminarYo creo que todos tenemos nuestro lado melancólico o romántico lo único, que otros lo explotan mas y otros menos. Un abrazo.
ResponderEliminar¿Es que alguna vez pusiste en duda que hubiese un sólo hombre que no tuviese corazón o que no buscase una luna llena entre las nubes? Todos tenemos esa sensibilidad de poeta, es que nos empeñamos en matarla a mazazos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Javir.
ResponderEliminarMe gustan las noches de Luna con nubes que juegan con los destellos de su luz (prestada del Sol) son más romanticas y misteriosas.
Un abrazo
Amigo del Pozo, los mafiosos, cierto, también lloran, pero a escondidas. Solo lo sabemos los amigos.
ResponderEliminarUn abrazo
Sheol, nada más melancólico que un romántico escondido por los rincones.
ResponderEliminarUn abrazo
Mercedes, lo dudaba cuando en mi pecho sonaba un toc...toc.........toc...toc.......toc...toc. Y despejé las duda cuando descubrí un ¡toc-toc, toc-toc, toc-toc!
ResponderEliminarY no hay maza que me rompa el ritmo.
Un abrazo
APU,
ResponderEliminarTú no estás viendo una luna ni las nubes...estás encuadrando una foto...
Un abrazo
Hoy con la luna llena, lucía espléndida, contodo su poder, adelantando partos, alterando a los esquizofrenicos, iluminando a los maletillas en el campo y a los ladrones de gallinas, todos estamos bajo su influjo.
ResponderEliminarUn abrazo
Sí, José, en el fondo creo que todos somos un poco lunáticos.
ResponderEliminarUn abrazo
Contemplar la luna sabiendo que está ahí mucho antes de que la Tierra engendrara al primer hombre, es algo que me estremece. Si ella pudiera contarnos...
ResponderEliminarBesos Javir.
Tienes en regalo en mi blog de blogger: http://solomemolestaami.blogspot.com/2011/01/selo-de-qualidade.html Un abrazo.
ResponderEliminarPrueba a escucharla, Aniki. Solo hay que mirarla fijamente a los ojos...y esperar a que te hable.
ResponderEliminarUn beso
Gracias, sheol.
ResponderEliminarEs una forma bonita de empezar la semana.
Un abrazo
Es un lucero que brilla en la oscuridad como un ápice de esperanza en medio de la noche y su misterio.
ResponderEliminarSiempre tendremos un motivo para amar a la luna.
LdP, tiene ese algo que hechiza.
ResponderEliminarUn abrazo