jueves, 30 de mayo de 2013

Cierre y Apertura de un Búho

La nueva terraza del Búho Bizco está a reventar. Durante el cierre por orden municipal de la taberna, se ha habilitado una terraza exterior y un patio interior, la 'zona VIP'. No hay mal que por bien no venga, repite Margarita Ricchi. El bien que ha venido es el tiempo necesario para preparar las zonas de verano en el Búho; el mal fue el cierre manu militari del pub. La corrupción que no cesa.

Tal vez alguien recuerde unos hechos extraordinarios acaecidos en el Búho Bizco en un frío día de enero: Fué que expusimos sobre un atril de madera noble el libro "Un bobo con ínfulas", fué que nos visitó José Antonio del Pozo, autor del libro, y fué que la sombra de John Wayne cruzó el salón principal del Búho. Demasiada luz para Miguel Manuel Lopi Yatodo, más conocido como Mimanolopillatodo, exconcejal de urbanismo y en la actualidad concejal de asuntos varios y socio del "Échatepayá", un local de copas recientemente inaugurado frente al Búho. Con el pretexto de que la sombra de John Wayne deambulaba sin DNI, nos acusó el muy bribón de acoger a inmigrantes sin papeles, además de meternos un multazo por no pagar a la SGAE el canon por exponer el libro junto con el autor, circunstancia que agravaba el supuesto delito. Gracias a los buenos oficios del comisario Gracia, o para ser más rigurosos: gracias a su adicción al whisky y a Lola, el comisario movió ciertos hilos que fueron decisivos para conseguir una nueva licencia de apertura del Búho. Ahorraré los detalles.



En la terraza del Búho Bizco hay nueve mesas y cuatro toneles puestos en pié que hacen la función de mesa-barra. Sus sillas y sus taburetes. Y todo cubierto por una jaima modelo "indignado de Sol" conseguida a muy buen precio en 'segundamano'. Le propuse a Lola que ampliase sus horizontes: Lola, niña, la terraza es tuya; lo único malo de tenerte en la terraza es que el Ayuntamiento nos pondrá un impuesto por poner bonita la calle; y vas con aumento de sueldo, propinas aparte.Pero las mujeres son como son, y yo no sé muy bien cómo son: Se agradece jefe -dice con voz dulce- pero la verdad, prefiero mantener la barra por medio. Me siento más segura, no sé...

Por lo tanto, y este es otro acontecimiento extraordinario no solo en el Búho Bizco sino en toda la barriada, la taberna necesita contratar a una camarera para la terraza. Y pendiente está el asunto del patio.

Con la remlodelación del Búho y la definitiva llegada del buen tiempo, espero -dice alguien- aparecer más por aquí.

Tengan una feliz primavera si finalmente se decide presentarse. 

14 comentarios:

  1. Uff menos mal que el comisario lo pudo arreglar antes de su depresión, que lo tiene agarrotado y sin salir a la palestra.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es la depresión de los cuarenta. A mi también me dura después de tanto tiempo.

      El sol ayuda, ya verás. Un abrazo

      Eliminar
  2. Javir, amigo, cuántas fatigas nos hacen sufrir algunos malnacidos corrutos. Cuánto siento que te hayan así jorobado. Con qué tino y con qué ironía conseguida has conseguido contárnoslo, Me alegro un montón q el Buhó siga adelante, que mi tocayo -aquí arriba- siga en plena forma escritora y que conserves el ánimo entero y la imaginación y la destreza escritora a tope. Un abrazo fuerte. (espero que no tuviera en serio nada q ver mi pobre libro con tus desventuras, cuánto macho cabrío prepotente prolifera por todas partes) Un abrazo, amigo. Fuerza y ánimo para la temporada.
    saludos blogueros

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tu libro fue nuestro consuelo, maestro.

      Daremos caña. Un abrazo

      Eliminar
  3. Pues ahora que ya tenemos las terrazas colocadas que el tiempo acompañe que ya va siendo hora... el comisario Gracia,adipto al whisky? Y yo que pensaba que solo bebia cerveza sin alcohol... como han cambiado algunos personajes de la vida real a la letra escrita :)
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Los trabajos de investigación de la poli, APU, en ocasiones exigen el disimulo, y una cosa lleva a la otra.

      Un abrazo.

      Eliminar
  4. Estas rodeado de buenos amigos, tanto el comisario Jose Antonio como Lola, una estupenda agente comercial experta en gestionar asuntos delicados como el que expones, se puede salir adelante...
    Me alegro de volver a leerte :))

    un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ola, Esi. Más me alegro yo de verte por aquí. Nos leemos. Un abazo

      Eliminar
  5. Las mesas que son barriles o viceversa siempre me ha gustado mirarlas pero son incomodas porque...¿donde metes las piernas? Una mesa tiene que ser hueca por debajo.
    Un abrazo, Javir

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es cierto lo que dices, Romek, por eso lo ideal son los barriles sin taburetes. Una barra redonda donde todos estamos a mano.
      Un abrazo

      Eliminar
  6. Lo que dice Romek es cierto jajaja, Eso de tener que estar con las piernas encogidas o casi metidas en el bolso, resulta un pelín incómodo. Pero como tú bien dices, una mesa circular es lo ideal para no tener que andar a gritos como ocurre con las mesas rectangulares. Definitivamente, en una mesa circular todos y todo está al alcance de la mano, la boca y el oído.

    Besos.

    ResponderEliminar
  7. Y digo más, Aniki: en una mesa circular sin taburetes, nadie pierde su silla como el que se va a Sevilla, porque -dicho sea entre tú y yo- no debe de haber castigo por ir a Sevilla. Más bien el premio de estar.

    Un beso

    ResponderEliminar
  8. Sean rebienvenidos el Búho y su gerente. Que vivan las reaperturas. Esta vez que sea para muy largo, hay que darle al comisario Gracia motivos de investigación.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  9. Sea bienvenido el Buho, como tienes grandes amigos, con una pequeña ayuda se reabre el Buho. Enhorabuena


    un abrazo

    fus

    ResponderEliminar

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...