Más sobre los chiringuitos.
Tropezarme con esta noticia y multiplicar mi aversión pon el funcionario capachiringuitos ha sido todo uno.
A este país, además del Corte Inglés, lo une el ajo y los chiringuitos. Ahora, un oscuro funcionario cuyo único objetivo en su vida es dejarnos sin cañas en la playa, está fraccionando España. ¡No hombre, no! Y no es por patrioterismo, es por tomarme una caña fresquita con boquerones a la vera del mar. De cualquier mar.
Leo en la noticia que los chiringuitos costasoleños se están salvando. ¡Oiga, ni tocarlos!
¡¡Por una España con chiringuitos!!
Y con este grito de angustia y desesperación doy por inaugurada mi cruzada para salvar a los chiringuitos playeros.
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