Ayer de blue day y servidor sin saberlo. Me enteré por la noche, a última hora y por internet. Es lo mejor. De haberlo sabido veinticuatro horas antes, quizá, solo quizá, qué digo quizá, seguro y más que seguro, hubiese condicionado el tercer lunes de enero, día elegido para el blue day, el día más deprimente del año.
El blue day comenzó a las cero horas del tercer lunes del primer mes del año, justo cuando me metí ne la cama y me di cuenta de que no tenia sueño. Lo llamé, al sueño, y no llegó. A las tres de la madrugada me levanté, di una vuelta por Internet y me puse una serie: "Carlos", el terrorista venezolano que trajo de cabeza a media policía europea. Son tres capítulos de cerca de dos horas cada uno. Vi dos. Entre uno y otro me preparé una tostada; durante la operación se me resbaló la aceitera, se rompió y tuve que recurrir al tulipán. El té, recordé, se acabó el sábado y como soy el único que lo toma no se repone si no aviso o lo compro. Sin té. No importa, también soy adicto al café. Café, sí, el que se llevó la niña a una cena de amigas: Todas, me dijo y ahora lo recuerdo, tenemos que llevar algo para cenar; yo llevo el café. Todo el café. Encontré una bolsita individual de ColaCao, caducada, ¡y qué! Desayune tulipán con colacao.
Me creerán si les digo que la primera gota del primero de los muchos cafés de día -recuerden, no dormí- planeó y aterrizó en todo lo alto mi camisa blanca, España camisa blanca de mi esperanza. Me pasé el día explicando que sí, que ya sabía que la camisa está sucia, pero qué le voy a hacer si a mi manchita roja se acostumbraron mis ojos. Ojos que se me cerraban sin avisar; creo llegué a soñar mientras caminaba.
El día, resumo, fue normalito salvo por las dos multas -velocidad y aparcamiento-, por el golpe que le di a un insensato que frenó frente a un semáforo en rojo en medio de la calle y por alguna cosilla más que les ahorro, que no es cosa abusar.
Ya en casa, me preparé un té que compré de vuelta, repasé las noticias y me enteré de que el día que acababa era el blue day. Ufff -pensé- qué suerte no haberlos sabido hasta ahora; si me entero de esto anoche igual me deprimo y se me jode el día.
Como decía La Codorniz - No llores por la pérdida del sol, pues tus lagrimas haran que no te des cuenta de la caca de perro que vas a pisar. Es decir que todavía puede ser más atroz el día.
ResponderEliminarUn abrazo
Pero si el día no fue malo. Rarito, pero no malo.
EliminarPues yo me acabo de enterar...menos mal.
ResponderEliminarNO creas que te hubiera cambiado gran cosa. Mucha meiga es lo que hay.
EliminarUn besote
Hola javir.
ResponderEliminarpues me alegro que no pasaras por mi blog un día antes je,je,je. Un abrazo
http://apureal.blogspot.com/2012/01/el-proximo-lunes-16-de-enero-podria-ser.html
Sí APU, me hubiera matado tu apunte sobre los puentes desaparecidos.
EliminarUna abrazo
Pues no te cuento; en Portugal se los ham quitado directamente de un plumazo...y todo eso dicen que lo hacen por nuestro bien. Habrá que dar las gracias de que se han gastado el dinero del contribuyente para que nos cuiden tanto ahora.
EliminarUn abrazo
¿Te miró un tuerto...?
ResponderEliminarjeje...yo escondo las cosas que quiero que no me quiten mis hijas. ¡Ala! pues "que haiha salú" y mejor suerte para otro día, qué se le va a hacer. Esta vivo ¿no? pues eso...
Me miraron cara a cara que es la primera, que es la primera...eso es lo más inquietamente. Y vivo, sí; más o menos.
Eliminarjo, esto se me come letras.
ResponderEliminarSeguro que has sido tú...
ResponderEliminar;)
¡Eso es actitud, y lo demás son tonterías!
ResponderEliminarDespués de ésto que te echen todos los mondays que vengan!
Ya te digo...
EliminarImposible... no me creo que te deprimieras; en todo caso, de haberlo sabido quizá (o tal vez jaja), habrías cambiado de serie por una con nombre de mujer, mas que nada para no comenzar con la camisa llena de café y continuar con las multas y el golpe.
ResponderEliminartanto nos influye la tv que vemos y las lecturas que leemos? jaja
tus palabras tienen influencia positiva.
un abrazo
Pues ahora que lo pienso, sí. El error, mi error, ha sido matar una noche de insomnio con una serie sobre terroristas. Mejor me hubiera ido si hubiera pasado la noche con Carmen la de Ronda
EliminarUn abrazo
Carmen la de Ronda?
ResponderEliminaruna gran mujer jaja
me resulta muy difícil escribir/vender un buen relato!!
gracias
:))